Hace muchos años no vamos a Perez Zeledón. Creo que la última vez fue antes de la pandemia. No teníamos ni idea de donde parar en el camino para desayunar. Por la temporada alta de vacaciones, escogimos salir de San José de madrugada y llegar muy temprano al otro lado la Coordillera.
Después de pasar al frente de varios restaurantes, nos llamó la atención el rótulo de Reverie Coffee House y decidimos parar. Como nos confirmaron que aceptaban a Chiky como perro de asistencia, nos bajamos.
Pedimos omelet, desayuno típico, huevos benedictinos y café. Todo estuvo delicioso y el lugar es tranquilo. Esa hora nos sirvió para estirarnos y prepararnos para la siguiente parte de trayecto.
Notas Importantes
Solo hay dos mesas afuera.
Lleven bolsitas para los desechos y usen la correa siempre.