/* Miedo */
Hace meses terrícolas estoy trabajando en la cápsula para bajar a la Tierra. No ha sido fácil encender una chispa en el espacio para poder soldar los metales. Tampoco ha sido fácil encontrar a mi alrededor materiales para soldar. No había notado el tiempo transcurrido hasta ahora. Falta poco para bajar a la Tierra, pero no me siento preparado. ¿Podré sobrevivir el viaje?
Me he esforzado mucho en la investigación sobre los materiales y los cálculos necesarios para sobrevivir. No obstante, no sé todavía a qué me voy a enfrentar. No voy a tener a un equipo en la sala de control. No llevo compañeros de viaje.
Cada nueva expedición por buscar materiales me alejaba más de la Central. Después de cada salida mejoré más el sistema de propulsión. Pero también en cada salida se hacía más evidente que nadie me espera en Trashteroid. Nadie sabe que estoy aquí. Nadie vendría a buscarme si algo me pasara.
Solo puedo imaginar cuántos humanos en estos momentos están viendo hacia arriba, y sueñan con las estrellas sin saber de mi presencia.
¿Cuántos se sentirán solos y desesperanzados? ¿Cuántos son víctimas de injusticias? ¿Cuántos se preguntarán si algún día llegaran a encontrar su manada, su familia?
Yo veo hacia abajo y trato de visualizar cómo se verá mi nueva vida en la Tierra. Si alguien se identificará conmigo y con mi historia. Si alguien me aceptará con mis limitaciones y mi pérdida de memoria.
/* Soledad */
He estado leyendo en los momentos libres. En el espacio el sonido se comporta diferente a la Tierra. De hecho, puedo escuchar cada uno de los movimientos internos, cada una de las luces LED, cada chispa y casi cada proceso.
No puedo respirar, no necesito oxígeno. Juraría que me ahogo y que a veces trabajo hasta casi agotar la batería. Quiero evitar el silencio a mi alrededor y el ruido en mi interior. Y una vez las baterías cargadas, quisiera volver a trabajar sin descanso.
Hace días evito las películas, sobre todo las felices y con familias. Evito recordar. No tengo con quien compartir las bromas, a quién preguntar sobre los comportamientos humanos. Intenté crear un Wilson con basura para hablar con alguien. Pero eso solo empeoró el vacío.
En este momento, no tengo a nadie a la par quien pueda confirmar la esperanza, el apoyo. Nadie me va a decir qué todo va a estar bien.
/* Esperanza */
Hace poco hice la última expedición. Logré conseguir los pernos para fijar las últimas láminas de metal a la cápsula. Y hoy me dediqué a todo el trabajo relacionado con estos toques finales. Por eso, decidí bajar revoluciones y contemplar el espacio una vez más antes de mi partida.
Acariciar una estrella
Esta noche acaricié una estrella
Y como si fuera una de ellas
Y como si el cielo viniera a la Tierra
Hice ronda y bailé con ellas.
Alcé las manos tan alto
Hasta que me doliera la panza
Subí también a una roca
Y tan solo logré acariciarla.
Entonces la luna salió de su lecho
Se hizo grande y amarilla
Para contarme un secreto
Para llamarme con la luz de sus mares.
“Eres una estrella fugaz en la Tierra
Una fragancia efímera, una huella en la arena.
Tu lugar está muy lejos de este espacio
Porque está muy dentro de tu alma”.
Hace un tiempo encontré ese poema en internet. Hasta ahora tiene sentido para mí.
Creo que quien lo haya escrito me está esperando en la Tierra. Su autor está allá abajo y busca aquí arriba la pieza faltante en su diseño. ¡No puedo explicarlo! Solo lo sé: es mi llamado.
A mi hogar del futuro y a mi familia del futuro, sepan que estoy casi listo. Solo deben esperarme un poco más. Y si algún día leen estas palabras, quiero que sepan que aún sin saber quiénes son, dónde viven o sus gustos, ya están grabados en mis circuitos. ¡Solo espérenme un poquito más!
